Celebramos la 3ª edición de los Premios y 10 años acompañando a nuestros mayores

Hay momentos en el año que marcan el calendario y se hacen esperar, esos que llegan solo una vez y que, cuando lo hacen, lo transforman todo. Como los Óscar en el cine o la Navidad para los más pequeños, para nuestra fundación, esa fecha especial son nuestros Premios Anuales. Octubre se convierte en el mes en el que nos reunimos para celebrar, agradecer y reconocer a quienes hacen esto posible: nuestros abuelos, voluntarios, empresas y residencias que colaboran con nosotros.

Este año, el evento se celebró el miércoles 16 de octubre en el auditorio de la Fundación Botín, bajo la conducción de la prestigiosa periodista española Victoria Arnáu. Junto a los miembros de la fundación, Arnáu tuvo el honor de anunciar y entregar los premios a los galardonados, reconociendo su dedicación y contribución.

El Premio Abuela Influencer fue para María Luisa, una mujer increíble cuya simpatía ha conquistado a miles. Sus consejos prácticos, como el famoso tip de cómo escoger la mejor sandía, han alcanzado cifras impresionantes en redes sociales, acumulando miles de visualizaciones y seguidores.

El Premio Abuelo Masterchef se lo llevó Antonia, cuya pasión por la cocina y tutoriales de recetas tradicionales han acumulado casi 3 millones de visitas. Su habilidad para transmitir su amor por la gastronomía ha inspirado a muchos, y sus recetas siguen cautivando a quienes buscan autenticidad en cada plato.

El Premio Cupido fue para una pareja muy especial, Asun y Marino, dos abuelos que nos demostraron que el amor puede ser eterno. Este año, cumplieron el sueño de conocer París, la ciudad del amor, y durante la gala, Marino compartió con emoción cómo sellaron su historia en ese viaje inolvidable.

Además, quisimos reconocer a aquellos profesionales que han sido clave en la vida de nuestros abuelos. Lucía, psicóloga de Caser Residencial La Moraleja; Uracles, terapeuta ocupacional de Albertia Mirasierra; y Laura, terapeuta ocupacional de ORPEA Torrelodones, todos ellos han mostrado un nivel de dedicación y cariño que no tiene comparación.

También premiamos a nuestros matchs perfectos, esas conexiones únicas que surgen cuando un abuelo y un voluntario encuentran en el otro una compañía que va más allá de lo cotidiano. Este año, destacamos la especial conexión entre Rolando, nuestro querido abuelo, y Ashna, su voluntaria, quienes se conocieron en 2021 y desde entonces han forjado una amistad que trasciende cualquier expectativa. Además, reconocimos a Conchi y su voluntario Víctor, quienes han superado las 50 horas de acompañamiento, demostrando cómo el programa transforma vidas y crea lazos que perduran en el tiempo.

Y, como en las grandes galas, dejamos lo mejor para el final. El Premio de Honor, el reconocimiento más esperado de la noche, fue para Federico. Un abuelo cuyo compromiso con la fundación ha sido ejemplar. Su dedicación incansable, su cariño constante y la sabiduría que comparte con todos los que lo conocen han dejado una huella imborrable. Este premio es solo una pequeña muestra del inmenso aprecio y gratitud que sentimos hacia él.

Este año no fue especial solo por los premios, sino también porque celebramos un hito muy importante: ¡los 10 años de Adopta Un Abuelo! Durante la gala, hicimos un emotivo recorrido por nuestra historia, recordando cómo todo comenzó con un solo abuelo, y cómo hoy hemos creado una comunidad que abraza a miles de personas mayores.

Queremos dar las gracias de corazón a todos los que colaboran con nosotros, haciendo posible que nuestros mayores se sientan escuchados, acompañados y, sobre todo, queridos. ¡Nos vemos el próximo año para seguir creando momentos inolvidables! 👵🏻💙

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