La historia de Iván y Mariano: Un viaje intergeneracional de complicidad y aprendizaje

Hace un año, Iván decidió dar un paso fuera de su rutina diaria para embarcarse en una aventura única: ser voluntario de Adopta Un Abuelo. Nunca imaginó que esta elección le iba a brindar tantas alegrías y que iba a suponer un punto de inflexión en su vida. 

Iván se apuntó de voluntario de la mano de su empresa, Roche, y el equipo de Story Builders le hizo match con un abuelito de una residencia en Navalcarnero, llamado Mariano. Desde ese momento, Iván acude todas las semanas a la residencia a visitarlo. 

Algo que les une como amigos, es que ambos son muy charlatanes, por lo que sus encuentros se basan en hablar de todo tipo de temas: política, economía, fútbol, historia… Además, comparten el buen comer, por lo que su plan favorito es salir de la residencia a un restaurante cercano para tomar un vinito y un rico plato de jamón 🍷  

Iván dice que algo que le encanta de haber conocido a Mariano, es que se le ha pegado su curiosidad y ha aprendido infinidad de cosas con él. Por su parte, Mariano dice que Iván le ayuda a salir de su rutina, le llena de energía con sus planes diferentes y cuenta los días para que llegue la siguiente visita 🥰 Textualmente, Mariano recalca: “Para mí, ver a Iván y pasar un ratito con él, es lo más grande”. 


Adopta Un Abuelo no solo conecta generaciones, sino que crea lazos que perduran y enriquecen vidas de manera inesperada. Esta es la historia de Iván y Mariano, un testimonio vivo de lo que puedes encontrar cuando decides adoptar a un abuelo 💙

¿Te apetece vivir una experiencia como la suya? Anima a tu empresa a hacer voluntariado corporativo con personas mayores.

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